El día 2 de enero abrirá sus puertas una de las mayores singularidades que forman parte del conjunto catedralicio de Jerez: su torre-campanario. De origen mudéjar, esta torre se alza sobre la antigua iglesia del Salvador, erigida a su vez sobre la primitiva mezquita mayor de la ciudad. En el minarete de aquella mezquita encontramos el origen primero de esta torre. El campanario fue añadido siglos después, siendo de factura gótica en su parte inferior y barroca en la superior. Cuenta con ocho campanas de las que cuatro son fijas y cuatro de volteo, más dos pequeñas de señales. Además de una matraca de madera, única en el país dado su gran tamaño.
Las vistas desde su punto más elevado son únicas, permitiendo una visión espectacular de toda la ciudad y el Alcázar, así como una perspectiva magnífica de la catedral. Buenas noticias para Jerez, que a partir de enero podrá disfrutar de uno de sus monumentos más originales.